Roberto Cantoral García nació el 7 de junio de 1930 en Ciudad Madero, Tamaulipas. Su padre Antonio Cantoral Zambueza, huérfano de padre y madre, crece bajo el amparo de los padres Jesuitas; era hombre modesto, trabajador, de memoria privilegiada, y amante y experto en tauromaquia. Su madre Herlinda García Planes, mujer de gran inspiración y poetiza, es quien inculca a sus hijos el gusto por la composición ya que su hermano, Antonio García Planes, formaba parte de Los Trovadores Tamaulipecos junto con Lorenzo Barcelata, Ernesto Cortázar, Alberto Caballero y Andrés Cortés, quinteto que en los años veinte triunfa en México, Cuba y Estados Unidos.
En la adolescencia, Roberto y su único hermano Antonio se lanzan al mundo de la bohemia; al ser menores de edad, tenían que cubrir su rostro con un antifaz para poder trabajar en bares y centros nocturnos. En 1950 inician su carrera profesional con el dueto Los Hermanos Cantoral y conciben en coautoría los huapangos El crucifijo de piedra y El preso número nueve, temas que pronto se colocan en el gusto del público en las voces de Lola Beltrán y Miguel Aceves Mejía, entre otros.
En 1954 Roberto es miembro fundador, compositor y arreglista del trío Los Tres Caballeros, junto a la primera voz de Leonel Gálvez y al requinto de Chamín Correa, agrupación que marca toda una época en la música romántica mundial. Su lírica destaca por la originalidad de sus temáticas, remates, metáforas y poesía; musicalmente también poseían un estilo sonoro diferente ya que sus voces eran armonizadas de una forma distinta a los tríos del momento, técnica que el maestro Cantoral definía como voces rectas.
Tres años más tarde (1957) obras como El reloj y La barca se dan a conocer y alcanzan los primeros lugares de popularidad, rompiendo récord de venta y permanencia en nuestro país y en el extranjero y quedando grabadas en el histórico disco de 45 revoluciones que fuera el primer sencillo con dos éxitos mundiales en un mismo acetato.
En los años siguientes alrededor de mil quinientas presentaciones en más de cien países llevaron a Roberto Cantoral a recorrer el mundo, siendo invitado a los principales espacios de espectáculos de radio y televisión tales como los programas de Arthur Garfield, Ed Sullivan y Steve Allen en Estados Unidos, de Alice Bontorno en Italia y la Gran Parada en España, sólo por mencionar algunos.
A finales de la década de los setenta se convierte en El señor festival debido a que participa en los principales certámenes de la canción en países de todo el mundo como Brasil, Japón y Grecia, ocupando los primeros sitios. De estos concursos destaca el Festival de la Canción Latina en 1970, en el que se da a conocer una de sus obras más importantes en la voz de José José: El triste, tema con el que en Bulgaria se hace acreedor al premio Orfeo Negro.
En 1971 gana el Festival OTI con Yo no voy a la guerra, interpretada por Alberto Ángel El Cuervo, y en 1973 refrenda su triunfo en dicho certamen con Quijote, en la voz de Enrique Cáceres, mientras que al filo de los años ochenta su tema Al final, cantado por Emmanuel, ocupa los primeros sitios de popularidad. A lo largo de su carrera escribe con Dino Ramos Yo lo comprendo, Soy lo prohibido y Que mal amada estás, y con Manuel Sucher Quiero huir de mí.
Temas fundamentales del repertorio del maestro Cantoral son Pobre Navidad, de la que cede los derechos a instituciones de atención a la infancia del mundo, por lo que recibe el reconocimiento de dignatarios y primeras damas como la Reina Fabiola o Farah Pahiarr (emperatriz de Irán), Madame De Gaulle (Francia) y Lady Bird Johnson (E.U.A.); la canción Plegaria de paz, trasmitida durante tres años consecutivos en el Vaticano, así como la obra Para el hijo del hombre (The Final Warning), puesta en escena representada en los teatros más importantes del país.
Sus composiciones han sido interpretadas por destacadas figuras de la canción de todos los tiempos entre las que se encuentran Plácido Domingo, Joan Báez, Pedro Vargas, Maysa Matarazzo, Mina, Charo, Vikki Carr, Neil Sedaka, Dalida, José Feliciano, Antonio Prieto, Aníbal Troilo, Carabelli, André Kostelanetz, Nilla Pizzi, Luciano Taggiolli, Gregorio Barrios, René Cabel, Los Panchos, Los Diamantes, Trío Los Calavera, Marco Antonio Muñiz, Sara Montiel, Lucho Gatica, Olga Guillot, Gloria Lasso, Alejandro Algara, Linda Ronstadt, Caetano Veloso, Simone, Los Indios Tabajaras, José José, Vicente Fernández, Marc Anthony, Emmanuel, Luis Miguel, Alejandro Fernández, Fernando de la Mora, Cristian Castro, Mijares, Eddie Santiago, Il Volo, Rolando Villazón, Ramón Vargas, Gualberto Castro, Yoshio, Lila Deneken, Yuri, Lucía Méndez, Ximena Sariñana, Franck Pourcel, Paul Mauriat, Raúl di Blasio, Chucho Ferrer, Luis Cobos y Richard Clayderman, entre muchos otros.
Su obra musical le valió innumerables premios y distinciones, entre ellos destacan dos discos de oro en Hollywood por El Reloj y La barca; Guitarra de Oro en Pessaro, Italia, por Noche no te vayas, en 1958; Medalla al Mérito otorgada por el entonces Presidente de la República Adolfo López Mateos, por sus diversas giras internacionales, en 1963; presea Diana Cazadora y galardón Cuauhtémoc de Oro, en 1969; disco de oro en Hollywood por El triste, en 1971; Uvas de Oro Vergel, en 1976; Espuelas de Plata en Argentina por El reloj al ser una de las canciones más escuchadas de todos los tiempos, en 1980; Mr. Amigo en Brownsville, Texas, y ciudadano honorario de dicho estado, misiva en reconocimiento a su trayectoria por parte del ex presidente de los Estados Unidos de Norte América Ronald Reagan, en 1982; primer compositor en ingresar al Salón de la Fama, en 1989; Estatua de Bronce por parte de AGADU en Montevideo, Uruguay, en 1997; la Organización de las Naciones Unidas (ONU) lo invitó a entregar el Corazón de Oro a Sri Chinmoy, en 1998; en los 50 años de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT) recibe el premio Antena de manos del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, en 2008, y el Grammy (Trustees Award) por parte de la Academia Latina de la Grabación, en 2009, entre muchos otros.
En 1982 el maestro Roberto Cantoral García es electo Presidente del Consejo Directivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), dejando a un lado su carrera artística para dedicarse a elevar la calidad de vida de los compositores mexicanos, cargo que desempeña hasta el día de su muerte.
Entre sus logros como líder destacan las reformas a la Ley del Derecho de Autor con las cuales logra terminar con los contratos de cesión de derechos a perpetuidad, regresando al autor la paternidad de su obra; la protección de cien años después de la muerte del creador, extraordinario beneficio patrimonial para sus herederos antes de que la misma se convierta en dominio público —cabe aclarar que México es el único país del mundo que tiene ese alcance de protección post-mortem—; fue cinco veces Presidente del Comité Iberoamericano de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC); su incansable labor y prestigio ayudó a la creación de distintas leyes que fortalecieron el reconocimiento del Derecho de Autor en todo el continente, y transformó a la SACM en una Sociedad de gestión colectiva, colocándola entre las Sociedades autorales más avanzadas e importantes del mundo.
En 1993 el maestro Cantoral era la única persona no gubernamental —hasta ese momento— en hacer uso de la palabra en un congreso de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), en donde fue ovacionado por su ponencia en defensa del Derecho de Autor. El 16 de junio de 2009 encabeza la ceremonia de colocación de la primera piedra del Centro Cultural que lleva su nombre, inaugurado el 7 de junio de 2012.
A: Roberto Cantoral
1935-2010
Cuando llovizna calor en mi tierra
es invierno en mi preciosa Toluca
y ya no canta el gallo pataruca
porque allá lejos no mira la sierra
Solo el maguey enturbia tu blancura
la luz que tiene tu jardín florido
linaje de Mr. Amigo el ungido
que existirá con resplandor y albura
En México días de lontananza
se formaran estrellas musicales
seres con dones sobrenaturales
una tarde de serena bonanza
Entona la campiña tlaxcalteca
atravesando en undosa cañada
montaña romántica enamorada
de la Tamaulipas esencia huasteca
El vapor cristaliza un nacimiento
en la noche cargando su guitarra
le lleva serenata a la Cigarra
con la voz de profundo sentimiento
Valdría un refrán popular que existe
Roberto dona El niño del pesebre
En Bulgaria Se puso muy alegre
Con la balada ganadora El Triste.
Se vislumbra muevo lucero… triplete
que formara Roberto Cantoral
el nace con su corona floral
endulzada con la miel del talnete
Nace un dúo que se convierte trío
Roberto y Antonio buenos aleros
conciben el grupo Los Caballeros
todo mundo ve de México el brío
Nació con su corona cisterciense
lo cuida San Roberto el Canonita
Mas tarde de la mano de un Jesuita
Yacerá el lucero Tamaulipense
Su música no muere es siempreviva
gratos poemas hechos melodía
Y que cimbran de emoción todavía
Es poesía pintura auditiva
Tiene el cielo de oro su taburete
Ya hay nuevo astro llamado Cantoral
nace y muere en Toluca el pedernal
Nace y muere Roberto en día siete
Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
“Hombre de Maíz”
Roberto Cantoral García falleció el 7 de agosto de 2010, legando a México uno de los patrimonios más importantes de la expresión romántica en el mundo.
Bello resumen de un gran defensor de los derechos de autor, excelente compositor y su poema también muy bello querido Rafael Mérida Cruz- Lascano