En mis noches enquistadas en poesía
mi pensamiento vuela,
entre jarrones de flores olorosas,
una deliciosa taza de café
y un buen libro aromatizado
con enseñanzas de flores de lavanda añejo.
Oigo el sonido de los Chelos
de los versos,
la imaginación sobrevuela
ciudades, asteroides y planetas;
juega con algún verso niño;
sus eternos patinajes
crean pinturas diversas.
El silencio nocturno besa mis pestañas,
azuza mi alma,
la eleva al limbo alto.
Coloridos pétalos de poesía
deshojados
caen en mis bocetos,
ángeles me dictan palabras sublimes aladas.
Aquí en mi desván, me siento libre,
aquí
soy una diosa sempiterna,
manipulando mis creaciones
a derecha e izquierda.
Aquí canto mis mejores versos canciones,
aquí la paz me cubre con sus blancas plumas;
es aquí, donde mi pluma se fortalece garbosa.
Autor: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Todos los derechos reservados
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