La mujer, ser amable, bondadosa y tierna, delicada como una flor y frágil como el pétalo de la misma. Es un ser admirable y respetable por todo ser humano; como mujer, madre, esposa, hija, y la misma no debe ser maltratada ni humillada jamás.
Después de la creación del mundo, lo más maravilloso, bello y respetado que Dios pudo haber creado se llama mujer. La mujer es el complemento en todo, es lo que le ha dado al Universo, la luz más bella y maravillosa que pueda haber en el mismo. A la tierra, lo mejor que pueda tener como ser humano y amoroso se llama mujer.
Entonces, por qué maltratarla, ultrajarla, humillarla y tratarla con desprecio, jamás; no debe existir maltrato contra la misma. Porque al momento de ser maltratada, piensa primero que la misma es madre, piensa que es esposa, piensa que es hija. No debe la misma recibir maltrato de ninguna forma jamás.
Por eso respetemos, amemos y llenémosla de pasión, cariño y ternura. Pensemos en nuestra madre, en nuestra esposa y compañera en las buenas y en las malas y en nuestras hijas.
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