Mujer,
efigie diamantada de amor, entrega y sacrificio,
pan de inmensa ternura,
luz, calor, fe.
Ave soñadora,
árbol de nueva era,
crías hijos de generación nueva.
Mujer torre alta de creatividad
múltiple abanico de posibilidades.
En tus manos
se abre un futuro nuevo,
son tus lágrimas
santos rosarios de bondad.
¡Qué nadie mancille los pétalos
de la efigie materna!
¡Qué nadie explote la piel lozana femenina!
Qué reciban siempre honor
tus amplios laureles de dignidad
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados
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