Recuerdo
Te contemplo desde mi memoria buscando mi
presencia en tus ojos y en tus labios.
Es mi esperanza que me encuentre en tus
mañanas, y cuando el dia zosobra en los
oceanos infinito de estrellas.
Tu no te has marchado de mi piel
ni de mi alma,
solo reposas en los altares de mis caminos
esperándote mas allá de mi última partida,
en alguna parte de este mundo o de aquel
que no conocemos,
porque la carne no lo es todo,
como la luz de los astros
que llegan sin saber que sólo son
misivas póstumas de constelaciones
que han muerto,
dormiré eternamente hasta que tu voz
la escuche en los valles del silencio,
y en las vertientes donde solo beben
las almas que se juraron amor eterno.
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