Añorada Madrecita
Vengo ante tus plantas Madre querida
A ofrendarte mi amor con sutil gratitud
Con dolores, y nunca te das por vencida
Eres una mujer santa, ejemplo de virtud
El día de la madre, me afano en visitarte
Reconozco contrito que soy hijo ingrato
Perdona madre bella nunca voy olvidarte
Desde hoy, siempre cuidarte te prometo
Han pasado muchos años desde mi infancia
Cuando guiabas con amor mis primeros pasos
Mi Juventud tuvo tu apoyo y vital fragancia
Para conducirme por la existencia sin fracasos.
Quiero recompensar tus noches en desvelo
Siempre junto a ti, para cuidarte con amor
Entregarme por entero y sin ningún recelo
Para disfrutar juntos la vida en su esplendor.
Madre, esperanza de mí ansiada felicidad
Eres la generosa fuente que mi sed calmará
Tus acciones preclaras son llenas de bondad
Permíteme madre estar junto a ti,
Hasta que el Señor me llamará
Para viajar a su encuentro en a la eternidad.
Luis G Machado S.
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