Mirar Trascendental
Albergando en mis pensamientos ,que la vida es el corto aleteo
de un colibrí en su volar.
Observando que los astros ,han alumbrado miles de años atrás.
Que su luz ha llegado, cuando su silueta ya no existe más.
Una existencia de los elementos rápida, y sin dejar rastros de
su avanzar.
No puedo dejar de soñar.
No puedo.
En cómo perpetuar nuestros nombres, en los espacios donde
existen rocíos cósmicos, y estrellas que no morirán.
Como prolongar nuestro amor, en dimensiones donde los
sentimientos ,son tallos de horizontes, que sonríen al amor
por toda la eternidad.
Soñar.
Siempre soñar.
Porque del corazón nace, la deseperada inquietud del amor,
que reclama su derecho a trascender, en este Universo de
luces rojas y azul pasar.
Seguro de mis planteamientos, que han surgido de mis
silencios, cuando la tarde acaba su mirar.
Son sólo sueños.
Sólo eso.
Y cómo no soñar.
Si del soñar ,surge la permanente voz, que nadie puede asegurar
que es la realidad.
Realidad de arenas, donde puedo infinitamente caminar, con
quien me ha elegido para avanzar.
Avanzar entre senderos de pinos, que con los vientos cantan sobre
la inmortalidad del soñar.
Soñar que siempre a mi lado estarás.
Soñar que nos besaremos ,en espacios donde el amor llega y se
quedará.
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