Néctar

Déjame amarte como he aprendido a amar,
las orillas donde las olas descansan.
Donde he sentido la paz que jamás imaginé
que existiera, en estos lugares, donde el aire
es puro, transparente, como son mis pensamientos.
Porque cada día crece, la absoluta convicción,de
que eres el amor de vida.
No me equivoque cuando te miré entre el gentío,
sintiendo tu presencia en los dominios de mi mirada.
Dejé atrás cualquier intento de dar vueltas, y no pensar
en nada.
Hermosa es tu silueta, como finas ramas que danzan
por las tardes.
Por aquellas brisas suaves, que transitan libres sin pensar
si se acabaran por las noches,
o cuando la luna anuncie su llegada.
Te confieso que observe tu piel que asomaba, donde
terminaba tu vestido azul,como los cielos que dejaron
atrás nubes contorneadas.
Porque soñar no posee costos ,en monedas
plateadas.
Imaginé que te abrazaba, en los lugares donde
sólo estabámos tu y yo, planeando vivir unidos hasta
donde los oasis de esta vida terminaran.
Si los cielos comprendieran ,que nuestro amor es
tan grande como sus puertas rosadas,
nos dejarían permanecer unidos, mas allá de los huesos ,
de nuestras carnes, que brillan desnudas por los astros
en la noche tan ansiada.
Donde somos una sola corazonada,
de que nos amanos,
que ya no podemos vivir separados.
Son sueños,
son realidades,
una sola voz de amor, que se escucha en estas calles
talladas,
por mil corazones ,donde nuestros nombres han quedado
plasmados,
con néctar de estrellas, y tintas de labios enamorados.