Para toda la vida
Ensueños envueltos en palabras,
Que se ocultan dentro del alma,
Besos que con tus labios labras,
Agitando a mis nervios la calma.
Sin duda, es virtud tu paciencia
Que tus penas ocultas sin rencor,
Eres poema del bien por herencia,
Tu vida no merece tener más dolor.
Semejas la gota de rocío en el jardín,
La sonrisa fresca de toda alborada,
Tu piedad y devoción no tienen fin,
Por lo hermosa eres mi bien amada.
En el encanto de tus nobles caricias
Dejas un hálito, de amor y confianza,
Refugio que satisfaces con albricias,
Y tu regazo es refugio de esperanza.
Luis G Machado S.
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