Candilejas
Titilantes pestañeos, la luz en un rincón
acorralado sin escape, el humo del cigarrillo
una dama victoriosa, vitorea sus victorias
su mirada trasnochada, recuerdos que saben a glorias.
Arpegios de guitarras, amarados a los acordes de un bandoneón
compases de alegres milongas, enlazados a un tango tristón
su sangre se templa en antaño, palpitando hoy en su corazón
hay aromas de café, sobre las penas matizadas en alcohol.
Las caderas briosas pasadas, descansan sus pasos tranquilos
pestañas cómplices arqueadas, amparando el atrevido de sus ojos
sueños de tacones altivos, soñando otros sueños dorados
por sus mejillas se van los ayeres, por su boca regresan nuevos besos.
Elìas Almada
¡Tienes que ser miembro de SECRETOS DEL ALMA para agregar comentarios!
Únete a SECRETOS DEL ALMA