EL SILENCIO

[Emilio Dominguez Cortes]

Calla la vida, carnaval de risas contínuas, con la intención de vestir de fiesta

los corazones resentidos.

Luces, que deciden hacer guiños a los árboles, apenas sin savia, pues tan solo

intentan vivir a contrapelo...

Alcohol, para afrontar falsos júbilos, olvidar los recuerdos, y ahogar esos

besos que se han quedado vacíos...

Hemos tenido que paliar ausencias, retomando viejos monigotes hechos

con la fina y cálida arena de la playa, mientras que las gaviotas del 

puerto, deciden escuchar nuestra ténue voz, al propio tiempo que 

contemplamos, esas olas cadenciosas...

Debido a ciertas ausencias, nos vemos obligados a soportar, muchas

noches reclinadas en la distancia.