Somos muchos, los que nos consideramos caminantes,
que andamos recorriendo senderos y veredas, con los soles
del estío, y los días de lluvia..
Pensamos, que los suspiros bien nacidos, nunca mueren,
se transforman en besos errantes, que vagan por el aire,
en busca de su destino, hasta que logran encontrar
unos labios donde posarse..
¡Un beso, es un roce sutil entre dos lamentos!!
Es un dar, y recibir!!, en definitiva..un juego encantador!!
Del mismo modo, podemos decir, que las lágrimas
no suelen ser mudas..son gritos que salen del alma. Eso se puede
considerar tan cierto como lo es, que a todo otoño, le sigue,
el frío invierno.
Tan solo, al llegar la primavera, volverá la luna a bailar
nuevos boleros de amor, y las hojas secas, servirán
de abono para los nuevos deseos..
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