MI NAVE ....

[Emilio Dominguez Cortes]

 

Entre olas inmensas me encuentro...la tempestad no remite.

Mi nave, no es un galeón español de la Escuadra Invencible,

precisamente..

Tan sólo se trata, de una vieja embarcación, construida con ilusión,

en madera de cedro, embreada en repetidas ocasiones, con

la finalidad de que pueda resistir y afrontar, los muchos

embates del impetuoso océano..

En ésta nueva ocasión, decidí embarcar, con la ilusión y la esperanza,

de arribar de nuevo a mi anterior puerto..

Por mi mente, circula la idea de sentirme esclavo de su presencia,

por lo mucho que había representado para mi, tiempo atrás.

¡Aliento en cada momento, alcanzar la meta, y cumplir el

sueño deseado, al tener por prisión el paraíso!!

[Emilio Dominguez Cortes]

Un saludo Hector

[Emilio Dominguez Cortes]

Erika, tienes razón, tan solo hay que tener paciencia y perseverancia, por regla general, al final-a pesar de que no siempre es así- suele lograrse. Tamabién hay una cosa que no podemos olvidar y es que cuando uno arriba a un puerto en el cual se encuentra bien, desaparecen esas ganas de trasladarse a otro desconocido.

Un abrazo

[Emilio Dominguez Cortes]

Jennifer, tines razón, cuando existió algo especial entre dos seres, es difícil poderlo borrar en su totalidad de nuestra memoria. Pero entiendo que habiendo aceptación no causa gran dolor.

Un abrazo

[Emilio Dominguez Cortes]

Sebastiao, reflexionar tu sabes que es bueno hacerlo. Es una condición implícita de los seres humanos que se precian de serlo.

Un saludo