Ser Humano.
Levanta el hombre justo su cuerpo,
desde la sombra inmóvil del árbol grande.
Mirando los colores del universo, piensa
y escribe, lo que se le ha dictado desde su
corazón tan vivo,
tan despierto,
cómo he de constuir puertas sólidas donde entre
la humana conciencia,
de que solo necesito la inocente devoción hacia
lo humano,
para vivir feliz en este mundo de montañas altivas,
de aguas generosas que puedo ofrecer al hermano
sufriente,
del dolor que lo atrapa, y no lo deja crecer, como
los caminos que se abren hacia lo lejano de este mundo.
Porque no se trata solo de la harina del pan diario,
del agua que hierve en los braseros de la pequeña
casa,
es nacer libre en los campos de
las almas.
Que busque su destino en paz, en las escuelas de
la vida.
Que sus huesos sean sólidos ,como el acero de los
puentes.
La gran simbiosis que los altos designios ejecutan, en los
magnificos conciertos,
donde aplauden las luces del infinito cósmos.
Porque ser humano no es condena.
Es el gran milagro de amor del Dios de todas las contiendas,
por hacer de las mil tierras, el paraíso vivo
de sangre buena.
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