BIENVENIDA

[Emilio Dominguez Cortes]

Un suave movimiento ondulado, se desplaza por el

agua tranquila del estanque, como si el ala de algún

pajarillo la hubiera rozado.

De regreso, la noche se presentó bastante plácida

y tranquila, la luna brillaba con fuerza y gran

resplandor. Entiendo, que si en tu corazón, reinan

las nieves eternas del desencanto, no debes sentir

preocupación alguna, pues tu cuerpo mediante su

poder, será quien la derrita.

Si lo deseas, cuando empiece la nueva estación

primaveral, podrás sembrar en la tierra -ahora

que se muestra receptiva- un buen número de

semillas de paz y buenaventura, de ese modo tan

especial podrás adentrarte en la caverna de tu

reinado, donde serás rayo de sol que todo lo

ilumina...

[Emilio Dominguez Cortes]

Un saludo cordial Alida

[Alida I. Gómez]

como  Siempre 

y con mi admiracion