Presencia

[Emilio Dominguez Cortes]

Si supieras cuanto añoro tu peculiar presencia. Mi soledad permanece dormida en la espesura. Calza en tus lindos pies esos zapatos de gacela, y trasládate con premura hasta llegar a mi espesura. Adopta la figura de gladiadora y siéntete ascua impura por un instante. Penetra en el jardín de amarantos, lirios, rosas, magnolias y azucenas, allí podrás contemplar mi amor esperando tu deseada llegada. Has que tus ojos peleen con la llama del crepúsculo, mientras las hojas, se desvanecen en el agua de tu alma. Busca la armonía igual que lo hacen las rosas, en puro silencio. Espera que llegue la terde, para prender con tus manos de terciopelo, una rosa de fuego en tu corazón.